Así es el Áurea Palacio de Correos, el único hotel con cinco estrellas de Logroño

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• 200 metros, 80 bares y la mejor experiencia para tapear en esta calle de España

Aurea Palacio de Correos, en la muy céntrica plaza de San Agustín, tiene el emplazamiento perfecto para disfrutar de una escapada a la capital riojana. Está junto a la calle Laurel, la ruta de tapas y pinchos por antonomasia, con más de 80 locales dedicados al disfrute gastronómico.

Los riojanos siempre se habían quejado de que en la capital no tenían un hotel de cinco estrellas donde alojar a ese turismo de alta gama que visitaba la ciudad, atraído por el enoturismo y la buena gastronomía. A la vez veían cómo el edificio de Correos, neobarroco y levantado en 1932 en la plaza de San Agustín, languidecía abandonado. Hasta que el grupo hotelero Hotusa, propiedad de Amancio López Seijas, decidió poner fin a las dos cosas y dotar a la ciudad de su primer cinco estrellas: el Palacio de Correos, que abrió sus puertas en diciembre de 2021 bajo el paraguas de Aurea, una de las seis marcas de Hotusa, reservada para hoteles de autor, edificios singulares con un vínculo con la ciudad donde están. El proyecto de rehabilitación del edificio lo realizó el estudio de arquitectura Isern & Associats.

Edificio con pasado histórico

En este caso se materializa en una gran bodega con etiquetas riojanas (también hay de otras denominaciones) que recibe al visitante a la entrada del restaurante Matasellos (buena cocina tradicional con un precio medio de 30 euros). También hay guiños al pasado histórico del edificio, como las cabezas de león de la entrada o el panel de sellos que cuelga en todas las habitaciones. En total son 41 (de entre 24 y 34 m2), de las que dos son suites (una en cada una de las torres), y hay tres dúplex en la planta baja. El interiorismo de las estancias se rige por un estilo contemporáneo donde mandan los tonos ocres y dorados.

Spa y terraza con servicio de bar en la azotea

Igual que el resto de los hoteles Aurea (de momento 10) son urbanos y tienen spa. En este caso con una piscina, sauna, baño de vapor, ducha tropical, cabina de tratamientos y zona de relax. Al lado hay un pequeño gimnasio.

En la azotea del edificio se encuentra la muy solicitada terraza con servicio de bar y vistas sobre la ciudad, abierta también a clientes no alojados.

Si la ubicación en pleno centro de Logroño es inmejorable para una escapada, también hay que reconocerle una muy buena nota en las tres cosas que más valoran los clientes de hoteles: la cama, la ducha y el desayuno. Habitaciones, desde 100 euros (desayuno, 17 euros).

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