Las cobayas, también conocidas como conejillos de Indias o cuy en quechua, son originarias de los Andes, una región que abarca parte de los actuales Colombia, Ecuador, Perú y Bolivia. En estos territorios, las cobayas fueron domesticadas hace más de 5.000 años, principalmente como fuente de alimento. Si bien su papel como ganado de consumo se mantiene en algunas zonas, en la actualidad, la cobaya es uno de los pequeños roedores más populares como mascota en muchos hogares del mundo.

Hoy en día, lo que encontramos en las tiendas de animales son cobayas domesticadas, descendientes de las especies que aún sobreviven en estado salvaje, como la Cavia tschudii, un pariente cercano que se encuentra en diversas zonas de América del Sur.

A pesar de su corta historia como animales de compañía, las cobayas han evolucionado adaptándose bien a la vida doméstica, donde se han hecho queridas por su naturaleza dócil y la capacidad de establecer vínculos cercanos con los seres humanos.

¿Cuánto puede vivir una cobaya?

El rango de vida de una cobaya varía considerablemente, pero la mayoría alcanza entre 4 y 8 años, con algunos ejemplares excepcionales que pueden vivir hasta 14 años, como el caso de Snowball, la cobaya más longeva jamás registrada. Al igual que sucede con otras especies, su longevidad depende de una combinación de factores, entre los que destacan la genética, la dieta, el ambiente y los cuidados veterinarios.

Aunque no son animales especialmente longevos en comparación con otras mascotas, pueden disfrutar de una vida larga y saludable si se cuidan adecuadamente desde el momento de su llegada a casa. No obstante, en el caso de los conejillos de Indias destinados a consumo, que son sacrificados a los 3-5 meses, el concepto de ‘longevidad’ ni siquiera se plantea, lo que refleja la gran diferencia en los cuidados a los que se someten las cobayas de compañía y las criadas para carne.

Aunque no existen fórmulas mágicas para garantizar una vida prolongada, ciertas prácticas, aplicadas con consistencia, pueden asegurar que una cobaya viva mucho más allá del promedio.

1. Alimentación balanceada

Una dieta rica en heno, verduras frescas y agua limpia es esencial para garantizar el bienestar a largo plazo de una cobaya. Las cobayas no pueden producir su propia vitamina C, por lo que es crucial incluir suplementos o alimentos ricos en esta vitamina, como el pimiento rojo o las hojas de mostaza. El heno, que debe ser el alimento principal, no solo proporciona fibra, sino que también ayuda a prevenir problemas dentales, que son comunes en esta especie.

2. Ejercicio y estimulación mental

Las cobayas son animales activos por naturaleza y requieren ejercicio diario para mantenerse en forma y saludables. Además, la estimulación mental es igual de importante para evitar problemas de comportamiento y estrés. Hay que asegurarse de proporcionarles un espacio amplio para moverse y juegos que les permitan interactuar y explorar. Si no tienen suficiente ejercicio, las cobayas pueden desarrollar obesidad, lo que reduce su esperanza de vida.

3. Visitas regulares al veterinario

Aunque las cobayas no requieren tantas visitas al veterinario como los perros o gatos, una revisión anual es fundamental para detectar problemas de salud tempranos. Las cobayas son animales muy buenos para esconder su dolor, por lo que es fácil que se desarrollen enfermedades sin que se note. Durante estas revisiones, el veterinario comprobará su salud dental, su sistema digestivo y su piel.

4. Un entorno adecuado y libre de estrés

El ambiente de una cobaya debe ser limpio, cálido y libre de estrés. Esto incluye una jaula espaciosa, sin productos tóxicos en los materiales de la misma, y un lugar donde pueda descansar de forma tranquila. Se deben evitar los cambios bruscos de temperatura, ya que las cobayas son muy sensibles a los cambios en su entorno. Además, es importante que tengan compañía, pues son animales sociales que pueden sufrir de depresión si están solas o no se las hace el caso que demandan durante largos períodos.

5. Una buena higiene dental

El cuidado dental es una de las claves para garantizar la salud de las cobayas a lo largo de su vida. Sus dientes crecen continuamente, por lo que necesitan objetos para roer que les permitan desgastarlos. La falta de atención a este aspecto puede provocar problemas graves, como malformaciones dentales, que pueden afectar su capacidad para comer y, en consecuencia, su salud general.