Al doctor Javier se le bajó la mascarilla durante la supuesta violación a una paciente sedada.
Reportajes La Policía halla "fluidos" en el pantalón del doctor violador: "Llevó a cabo la presunta agresión sexual con descaro"EL ESPAÑOL accede en exclusiva a otro atestado de la UFAM que revela que la paciente tiene una "lesión" en la vagina.
Más información:Las imágenes que incriminan al cirujano plástico acusado de violar a una paciente: "Se ponía en medio de las piernas"
Jorge García Badía Publicada 20 diciembre 2025 13:16h Actualizada 20 diciembre 2025 15:21hLa imagen de gentleman que proyectaba el doctor David, sobre sus pacientes, podría esconder a un supuesto depredador sexual de los quirófanos. Así se desprende de otro atestado de la Policía Nacional al que ha accedido en exclusiva EL ESPAÑOL y que revela que han localizado "fluidos corporales" en el pantalón que usó este cirujano con la mujer a la que presuntamente violó, el jueves 4 de diciembre, mientras la sometía a un aumento de pecho mediante lipolifting.
“Debido al modus operandi, a juicio de esta instrucción, es posible que el denunciado haya llevado a cabo estos hechos otras veces, pues el día 4 de diciembre llevó a cabo la presunta agresión sexual, con total impunidad, descaro y delante de otras personas en el quirófano, siendo un indicio de que no era la primera vez que lo hacía”, tal y como sostiene la Unidad de Atención a la Familia y Mujer (UFAM).
Tal afirmación de la UFAM se produce después de visionar los dos vídeos que realizó la auxiliar de enfermería que aquel jueves ejercía de personal circulante, en el quirófano de un hospital privado de Murcia, alquilado por el doctor David, para someter a una paciente a un aumento de pecho, mediante extracción de grasa corporal: lipolifting.
De forma que colocó a la mujer en posición ginecológica en la mesa de operaciones, con las piernas abiertas sobre las perneras, y sin ropa interior como marca el protocolo. “En el visionado de los vídeos se puede observar a la paciente completamente tapada por sábanas de papel azul, salvo los muslos y la zona genital, y a David G. S. mientras extrae la grasa con una cánula, haciendo movimientos oscilantes para delante y para atrás, con la mascarilla por debajo de la nariz”.
Tales movimientos de pelvis se deberían a que el cirujano estaba penetrando presuntamente a la paciente: “Se puede observar los pantalones a la altura de los pies, arrugados. Además, se aprecia cómo se mueve el pubis de la paciente cuando empuja el doctor".
“Se significa que debido a que los movimientos son tan sutiles, no se puede realizar acta de visionado en el que se perciba correctamente el movimiento del pubis, por lo que se remite el vídeo por exceso de cabida, para su correcto visionado”.
La UFAM remarca en uno de sus atestados que en el vídeo se aprecia al doctor David con los pantalones bajados.
Esas son las consideraciones iniciales que hacen los investigadores de la UFAM, a falta de analizar en profundidad las imágenes que han causado un terremoto sanitario porque el doctor David suma 15 años de experiencia en el campo de la Cirugía Plástica, Reparadora y Estética. De hecho, cuenta con dos clínicas en Alicante y Madrid y su currículum refleja operaciones en hospitales privados de Málaga, Toledo, Alicante, Murcia, Valencia, Torrevieja, Alcantarilla, Cartagena...
En esta presunta violación con penetración a una paciente, ocurrida en la mismísima mesa de operaciones y con una mujer completamente indefensa, bajo los efectos de la anestesia, cuya vida dependía del doctor David, las pruebas forenses jugarán un papel importante porque la víctima no fue consciente de nada.
De momento, este segundo atestado al que ha accedido este diario revela datos sobre el análisis del material desechable que se usó en esta intervención quirúrgica, gracias a que la dirección del hospital decidió guardar las bolsas de basura. La decisión se tomó tras visionar los famosos vídeos y escuchar el testimonio de la auxiliar de enfermería y de la enfermera que asistieron al doctor David (México, 1979) durante toda la operación.
"Se significa que en estas dependencias, hacen un cribado del material desechable médico del interior de las bolsas de basura, y que mediante luz ultravioleta, la cual, detecta fluidos corporales, reacciona al iluminar la bata azul que lleva el doctor en el momento de la operación. Que del material se obtienen muestras, para su estudio y análisis”.
Esas muestras de fluidos serán auditadas al milímetro en un laboratorio por su relevancia. Todo ello, a la vista de que el informe forense al que se ha sometido la víctima también ha detectado una lesión en la zona genital y la paciente no había mantenido ninguna relación sexual antes de entrar al quirófano, el 4 de diciembre, con este cirujano con fama de "educado", "metódico" y "elegante", al que le gustaba escuchar baladas románticas de Luis Miguel durante sus operaciones.
“Genitales externos normales. Introito vaginal muy atrófico, se utiliza espéculo vaginal. En cara lateral izquierda de vagina se visualiza lesión hiperémica petequias (se toma imagen médica con consentimiento verbal de la paciente)", según expone este atestado, sobre el informe forense de esta mujer, cuya última relación sexual data de junio de 2024.
La imagen que analiza la UFAM apuntando a que el doctor David colocó algunas máquinas para que no se viera su cuerpo.
En el primer atestado desvelado por EL ESPAÑOL se hacía constar que los investigadores de la UFAM habían auditado la distribución que presentaba el quirófano de este hospital privado, aquel 4 de diciembre, después de que afirmasen lo siguiente las dos testigos de la presunta agresión sexual: “El doctor David, según dicen la enfermera y la auxiliar, es el único cirujano que cambia la posición de la camilla”.
En esa auditoría, la Unidad de Atención a la Familia y Mujer afirma que el cirujano plástico no tenía encendida la cánula cuando estaba entre las piernas de la paciente, para extraerle grasa corporal para el aumento de pecho.
A lo que se suma que movió la mesa de operaciones para ver la puerta del quirófano, para controlar quién entraba o salía; colocó una máquina para "camuflar al doctor en su posición entre las piernas de la paciente" y llegó a decirle a la enfermera que “saliera a almorzar” en plena operación.
Tales situaciones llevan a la UFAM a afirmar esto: "Se percibe alevosía por parte del doctor, el cual, planifica desde el primer momento esta acción, cambiando la camilla de orientación para evitar ser visto y controlar la puerta de entrada y salida del quirófano, utilización de anestesia general, asegurando la acción criminal sin riesgo para el autor, ni capacidad de defensa para la víctima".
Hay otra víctima
La magistrada de los juzgados de Molina de Segura ordenó el ingreso en prisión del doctor David porque apreció "riesgo de reiteración delictiva" por su modus operandi y "riesgo de fuga”, debido a que nació en México y tiene familia en Estados Unidos. Las pesquisas policiales han permitido detectar a una segunda víctima, después de que tres mujeres prestasen declaración en Comisaría y una de ellas afirmase que tenía molestias genitales tras contratar los servicios de este cirujano.
“Estas víctimas no podrían sospechar nunca haber sido víctimas de agresión sexual, porque se encuentran ante un profesional de la medicina, al que encomiendan su vida y su salud, no pudiendo nunca pensar que pueda atentar contra su integridad moral y sexual, así como porque este tipo de intervenciones quirúrgicas (liposucción) son molestas físicamente en su recuperación, no pudiendo existir sospechas de haber sido agredidas sexualmente durante la operación”, según expone la UFAM.
Raúl Pardo-Geijo, ejerce la acusación particular de la primera víctima de este escándalo sanitario, y se muestra cauto ante las consideraciones policiales que recogen los dos atestados. "Desde la situación que supone solo disponer de 2 fotogramas intrascendentes y ver mil informaciones contradictorias en los medios, la prudencia obliga a tener cautela".
El conocido penalista Raúl Pardo-Geijo.
"Se está afirmando que el vídeo recoge de forma clara la realidad de una agresión sexual y no es así: la Policía y la juez le dan mucho más valor al testimonio de las enfermeras que a ese vídeo que ni los superiores supieron interpretar", tal y como reflexiona el afamado penalista murciano, Raúl Pardo-Geijo.
"En Derecho Penal hay que trabajar con rigor, alejado de las pasiones populistas y así lo haré, actuando con la máxima contundencia, pero respetando todos los derechos fundamentales, como así lo desea mi representada con toda lógica".
La Policía Nacional confirma que la UFAM "mantiene abierta la investigación", para ver si encuentran a más víctimas de agresiones sexuales perpetrada por el doctor David. Hasta ahora, se tiene constancia de dos, pero no descartan que salgan más porque consideran que actuaba "con abuso de superioridad y confianza, por su posición de médico-paciente”.
"Se considera que cabe la posibilidad de que haya un potencial número de víctimas del doctor David G. S., las cuales no han interpuesto denuncia motivadas por el desconocimiento de los hechos, sedadas, bajo sumisión química, sin derecho a defensa y sometidas a la voluntad del profesional".