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Los valores españoles han mejorado la retribución al accionista de forma constante desde 2020. Hasta noviembre han repartido en dividendos 37.700 millones, la segunda mayor cifra de la historia.
Las empresas de la Bolsa española viven un año récord en el mercado de valores y brillan con sus dividendos. En 2025 encadenan cinco años de mejoras de la retribución al accionista tras repartir 37.711 millones en dividendos hasta noviembre, un 9,86% más que en el mismo periodo de 2024. Esta cifra superó lo pagado en todo 2024 (37.507 millones), a falta de un mes para el cierre del ejercicio. Es el segundo mejor año de la historia en dividendos repartidos, sólo por detrás de 2014, cuando se distribuyeron 43.260 millones. Desde 2020, las cotizadas han distribuido más de 168.173 millones.
A lo largo de 2025, las cotizadas han ejecutado programas de recompra y posterior amortización de acciones que complementan los rendimientos derivados de la inversión en acciones. Han amortizado acciones por 10.507 millones de euros en valoración entre enero y noviembre de 2025. Es un 22,6% menos que en el mismo período de 2024, un año récord.
Sumando dividendos y amortizaciones, se han superado los 48.218 millones de euros de retribución. Es la cifra más alta desde 2023, cuando se alcanzaron 53.448 millones.
La Bolsa española consolida su posición como un mercado de alta retribución para el inversor, con una rentabilidad por dividendo media del 4,1% desde 1986, entre las más altas de Europa.
Si se suman reducciones de nominal y devolución de primas de emisión las cotizadas se repartieron hasta noviembre 38.700 millones de euros. También es la segunda cifra más alta de la serie histórica, por detrás de los 43.408 millones de 2014. La importancia del dividendo queda más patente en el largo plazo. Según el informe anual de BME, en tres años el Ibex 35 ha subido el equivalente a un 27,52% anual y el Ibex con Dividendos un 33,26%. En 18 años, los que ha tardado en alcanzar su antiguo máximo histórico, el Ibex no habría obtenido rentabilidad alguna, pero el Ibex con Dividendos en ese periodo le habría dado al inversor el equivalente a un 5,08% por cada uno de los 18 años transcurridos.
La Bolsa española ha superado esta semana por primera vez en su historia los 17.000 puntos y enfila el segundo mejor año tras subir en 2025 cerca de un 47%. Sólo le supera el 54% de 1993. El dinamismo de las cotizaciones se ha reflejado en la actividad general del mercado, según Juan Flames, consejero delegado de BME. El volumen de contratación creció un 19% hasta noviembre y alcanzó los 349.000 millones de euros. El número de operaciones aumentó un 7%, llegando a 29 millones.
El importe de las ampliaciones de capital creció un 80%, superando los 10.900 millones de euros. La operación de Iberdrola fue la más destacada, con 5.000 millones de euros. Es la cifra anual más alta desde 2021, cuando se superaron los 21.000 millones, según las cifras de BME.
Se registraron tres salidas a Bolsa en el mercado principal (HBX, Cirsa e Izertis) y 11 incorporaciones en los mercados de crecimiento (BME Growth y BME Scaleup). Estos mercados de crecimiento aportaron más de 590 millones de financiación directa.
Petición de incentivos
Pero los mercados necesitan robustecerse para afrontar los grandes retos económicos de Europa, según comentó ayer Flames, en su discurso en el tradicional evento navideño. La reactivación de la inversión directa de las familias se ha convertido en una prioridad estratégica. Flames ha enfatizado que ni el gasto público ni el crédito bancario serán suficientes para la financiación corporativa futura. Por ello, reiteró que es "imprescindible traer de vuelta al minorista a la Bolsa". Para facilitar esta transición y fomentar que las familias inviertan directamente en los mercados -contribuyendo así al crecimiento de las empresas-, BME reclama diseñar instrumentos como la conocida "cuenta sueca". Este mecanismo debería ofrecer incentivos fiscales para promover el trasvase de fondos desde productos tradicionales de ahorro hacia productos financieros de inversión, señaló el CEO de BME.
Como medida concreta ya implementada, BME creó en julio una tarifa especial para operaciones de minoristas que ofrece una rebaja de hasta el 50%, y a la cual ya se ha adscrito el 70% de los miembros del mercado, según dijo.
Bjørn Sibbern, presidente de BME y consejero delegado de SIX, dueño de la Bolsa española, celebró durante su intervención el fuerte impulso económico mostrado por España este año y el registro histórico de la Bolsa española.
A pesar del éxito, Sibbern advierte de que "la continua inestabilidad geopolítica y las frágiles relaciones entre países y áreas económicas aumentan el riesgo de perturbaciones en los mercados, que las infraestructuras de los mercados financieros, como BME, deben amortiguar con sistemas estables y resilientes". SIX está llevando a cabo la armonización de las plataformas de negociación en Suiza y España utilizando tecnología Aquis. Esto permitirá a los clientes acceder fácilmente a los mercados de Suiza, la UE y el Reino Unido, buscando una alta liquidez bajo el principio de "una conexión múltiples mercados", recalcó Sibbern. "Contamos con una atractiva combinación de negocios con una cartera diversificada más allá de lo habitual. Aunque operamos en un entorno cada vez más competitivo, este enfoque ha demostrado ser sólido y eficaz", comentó.
Hitos en renta fija para el mercado español
El mercado de deuda también saca músculo, con crecimientos significativos en la financiación corporativa y el mercado alternativo.
En emisiones de deuda corporativa, el volumen de emisiones se incrementó un 52%, superando los 79.000 millones de euros, según datos facilitados ayer por BME. El Mercado Alternativo de Renta Fija (MARF) alcanzó este año un nuevo hito al superar por primera vez la barrera de los 10.000 millones de euros en saldo vivo, lo que mide su capacidad de financiación. "En 2025, el MARF ha visto como muchas de las empresas que habían emitido pagarés en años anteriores ampliaron sus vencimientos y colocaron nuevas emisiones de bonos en el mercado con vencimientos más amplios", asegura la Bolsa española en su informe anual. La Bolsa española, con el apoyo de la CNMV, está haciendo esfuerzos en agilizar los procesos para retener las emisiones de renta fija. BME continúa el trabajo de repatriación de emisiones y ha recuperado once emisores desde 2020, con un volumen acumulado de 47.000 millones. Es el segundo año completo en el que está en vigor la Ley de los Mercados de Valores y Servicios de Inversión (LMVSI) para dotar a los mercados españoles de renta fija de un marco más ágil, eficiente y competitivo. Las emisiones de deuda realizadas por emisores españoles aumentaron un 41,6% interanual hasta septiembre.
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