Monday, 08 de December de 2025
Tecnología

Unos investigadores quitaron Instagram y TikTok a 300 jóvenes para ver si su ansiedad bajaba. Los resultados hablan solos

Unos investigadores quitaron Instagram y TikTok a 300 jóvenes para ver si su ansiedad bajaba. Los resultados hablan solos
Artículo Completo 982 palabras
El debate sobre si las redes sociales son el nuevo tabaco para la salud mental de la generación Z lleva años encendido. Son muchos los jóvenes que no pueden estar sin ver TikTok completando la racha con sus amigos, subiendo historias de lo que comen a Instagram o simplemente alejados del móvil. Y esto es algo que puede ser tremendamente perjudicial.  Lo que sabíamos. Hasta ahora podíamos hacernos una de ella, y sin duda los padres recuerdan este mensaje cuando se pasa muchas horas delante del teléfono. Incluso las empresas ofrecen las herramientas para poder limitar la cantidad de tiempo que pasamos en una app e incluso nos aplica límites.  Con números. Pero ahora la ciencia ha dado luz a este problema con un estudio publicado en JAMA Network Open que arroja datos concretos. La premisa fue sencilla: pedir a un grupo de jóvenes adultos (de 18 a 24 años) que redujeran su consumo de redes sociales durante esta semana. Una vez hecho, se quería ver si se disminuían los síntomas de ansiedad, depresión o insomnio.  Y es que precisamente el uso excesivo de las redes sociales está relacionado con la depresión, puesto que genera aislamiento social, baja autoestima, ciberacoso o incluso trastornos del suelo por los efectos de la luz azul de la pantalla. Entonces... ¿Dejando el móvil también se mejora la calidad de la vida de los jóvenes? En Xataka "11 señales de que tienes TDAH y no lo sabes": cada vez más personas se están autodiagnosticando problemas de salud mental El estudio. Para hacerlo no solo se centraron en lo que los usuarios decían que hacían con sus teléfonos móvil, puesto que mentir puede ser muy sencillo en este caso. Lo que hicieron fue registrar de manera pasiva lo que se hacía con el teléfono a través de la técnica 'fenotipado digital'.  En total fueron 373 participantes los que formaron de este estudio, de los cuales solo 295 pudieron acabar la intervención, que era completamente voluntaria. Solo debían reducir el consumo durante una semana de las redes sociales principales: Facebook, Instagram, Snapchat, TikTok y X.  Los resultados. En pocas palabras, los resultados mostraban una mejora clínica significativa entre áreas clave tras solo siete días. Los datos apuntaban a que los síntomas de depresión se reducían en un 24,8%, en la ansiedad el 16,1% y los problemas de sueño cayeron un 14,5%.  Curiosamente, el estudio encontró que los efectos eran mucho más pronunciados en aquellos participantes que ya presentaban síntomas de depresión moderada o severa al inicio del experimento. No se suelta el móvil. A priori se puede llegar a pensar que cuando un joven dejas las redes sociales apartadas automáticamente, el móvil no le servirá absolutamente nada. Pero nada más lejos de la realidad. El fenotipado digital reveló que, aunque el uso de redes sociales cayó de unas 2 horas diarias a solo 30 minutos, el tiempo total de pantalla aumentó ligeramente en un 4,5% y los participantes pasaron un 6,3% más de tiempo en casa. De esta manera, los usuarios sustituyeron el scroll infinito de TikTok por otras actividades digitales como por ejemplo mensajería, navegación a través de internet o también jugar. Sin embargo, a pesar de seguir pegados a la pantalla, la salud mental mejoró.  Esto refuerza una teoría que gana peso entre los expertos: el problema no es la pantalla en sí, sino cómo la usamos. El estudio señala que el tiempo de uso objetivo tiene una asociación débil con la salud mental, puesto que realmente daña es el "uso problemático", como la comparación social negativa o la adicción emocional a las plataformas. Apps más fáciles de dejar. Todos podemos tener más 'cariño' por una red social en concreto, que seguramente sea más difícil de dejar de usar. En este caso se vió que a los usuarios le resultaba más sencillo reducir el tiempo que invertían en TikTok o en X. Pero Instagram o Snapchat fueron los "huesos duros" a batir.  En Xataka Los jóvenes han decidido dejar de publicar (tanto) en Facebook e Instagram. La "bazofia generada por IA" tiene vía libre En concreto, el 67,8% de los usuarios de Instagram y el 48,8% de los de Snapchat no lograron cumplir con la reducción y siguieron usándolas significativamente durante el proceso de desintoxicación. No es un tratamiento. Aunque los porcentajes suenan a victoria, es necesario mantener el escepticismo científico habitual. El Dr. John Torous, coautor del estudio, advierte en declaraciones recogidas por el New York Times que reducir las redes "ciertamente no sería tu primera o única forma de tratamiento [en los problemas de salud mental]", aunque vale la pena experimentar con ello. Esto se centra en que el estudio tiene algunas limitaciones como la inexistencia de un grupo de control de referencia y tampoco se vio cuánto tiempo duró el proceso de desintoxicación de las redes sociales. Pero lo que no mejoró fue la soledad, puesto que eliminar estas redes sociales en las personas puede tener un efecto contrario al cortar también el vínculo de conexión que los une con otras personas.  Imágenes | Panos Sakalakis Vitaly Gariev En Xataka | Las redes sociales fueron un día un lugar donde contar nuestras vidas. Ahora la tendencia es otra: "cero posts" - La noticia Unos investigadores quitaron Instagram y TikTok a 300 jóvenes para ver si su ansiedad bajaba. Los resultados hablan solos fue publicada originalmente en Xataka por José A. Lizana .
Unos investigadores quitaron Instagram y TikTok a 300 jóvenes para ver si su ansiedad bajaba. Los resultados hablan solos

La soledad no mejora tras retirar las redes sociales a los más jóvenes

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José A. Lizana

Colaborador

José A. Lizana

Colaborador Linkedintwitter212 publicaciones de José A. Lizana

El debate sobre si las redes sociales son el nuevo tabaco para la salud mental de la generación Z lleva años encendido. Son muchos los jóvenes que no pueden estar sin ver TikTok completando la racha con sus amigos, subiendo historias de lo que comen a Instagram o simplemente alejados del móvil. Y esto es algo que puede ser tremendamente perjudicial. 

Lo que sabíamos. Hasta ahora podíamos hacernos una de ella, y sin duda los padres recuerdan este mensaje cuando se pasa muchas horas delante del teléfono. Incluso las empresas ofrecen las herramientas para poder limitar la cantidad de tiempo que pasamos en una app e incluso nos aplica límites. 

Con números. Pero ahora la ciencia ha dado luz a este problema con un estudio publicado en JAMA Network Open que arroja datos concretos. La premisa fue sencilla: pedir a un grupo de jóvenes adultos (de 18 a 24 años) que redujeran su consumo de redes sociales durante esta semana. Una vez hecho, se quería ver si se disminuían los síntomas de ansiedad, depresión o insomnio. 

Y es que precisamente el uso excesivo de las redes sociales está relacionado con la depresión, puesto que genera aislamiento social, baja autoestima, ciberacoso o incluso trastornos del suelo por los efectos de la luz azul de la pantalla. Entonces... ¿Dejando el móvil también se mejora la calidad de la vida de los jóvenes?

En Xataka"11 señales de que tienes TDAH y no lo sabes": cada vez más personas se están autodiagnosticando problemas de salud mental

El estudio. Para hacerlo no solo se centraron en lo que los usuarios decían que hacían con sus teléfonos móvil, puesto que mentir puede ser muy sencillo en este caso. Lo que hicieron fue registrar de manera pasiva lo que se hacía con el teléfono a través de la técnica 'fenotipado digital'. 

En total fueron 373 participantes los que formaron de este estudio, de los cuales solo 295 pudieron acabar la intervención, que era completamente voluntaria. Solo debían reducir el consumo durante una semana de las redes sociales principales: Facebook, Instagram, Snapchat, TikTok y X. 

Los resultados. En pocas palabras, los resultados mostraban una mejora clínica significativa entre áreas clave tras solo siete días. Los datos apuntaban a que los síntomas de depresión se reducían en un 24,8%, en la ansiedad el 16,1% y los problemas de sueño cayeron un 14,5%. 

Curiosamente, el estudio encontró que los efectos eran mucho más pronunciados en aquellos participantes que ya presentaban síntomas de depresión moderada o severa al inicio del experimento.

No se suelta el móvil. A priori se puede llegar a pensar que cuando un joven dejas las redes sociales apartadas automáticamente, el móvil no le servirá absolutamente nada. Pero nada más lejos de la realidad. El fenotipado digital reveló que, aunque el uso de redes sociales cayó de unas 2 horas diarias a solo 30 minutos, el tiempo total de pantalla aumentó ligeramente en un 4,5% y los participantes pasaron un 6,3% más de tiempo en casa.

De esta manera, los usuarios sustituyeron el scroll infinito de TikTok por otras actividades digitales como por ejemplo mensajería, navegación a través de internet o también jugar. Sin embargo, a pesar de seguir pegados a la pantalla, la salud mental mejoró. 

Esto refuerza una teoría que gana peso entre los expertos: el problema no es la pantalla en sí, sino cómo la usamos. El estudio señala que el tiempo de uso objetivo tiene una asociación débil con la salud mental, puesto que realmente daña es el "uso problemático", como la comparación social negativa o la adicción emocional a las plataformas.

Apps más fáciles de dejar. Todos podemos tener más 'cariño' por una red social en concreto, que seguramente sea más difícil de dejar de usar. En este caso se vió que a los usuarios le resultaba más sencillo reducir el tiempo que invertían en TikTok o en X. Pero Instagram o Snapchat fueron los "huesos duros" a batir. 

En XatakaLos jóvenes han decidido dejar de publicar (tanto) en Facebook e Instagram. La "bazofia generada por IA" tiene vía libre

En concreto, el 67,8% de los usuarios de Instagram y el 48,8% de los de Snapchat no lograron cumplir con la reducción y siguieron usándolas significativamente durante el proceso de desintoxicación.

No es un tratamiento. Aunque los porcentajes suenan a victoria, es necesario mantener el escepticismo científico habitual. El Dr. John Torous, coautor del estudio, advierte en declaraciones recogidas por el New York Times que reducir las redes "ciertamente no sería tu primera o única forma de tratamiento [en los problemas de salud mental]", aunque vale la pena experimentar con ello.

Esto se centra en que el estudio tiene algunas limitaciones como la inexistencia de un grupo de control de referencia y tampoco se vio cuánto tiempo duró el proceso de desintoxicación de las redes sociales. Pero lo que no mejoró fue la soledad, puesto que eliminar estas redes sociales en las personas puede tener un efecto contrario al cortar también el vínculo de conexión que los une con otras personas. 

Imágenes | Panos Sakalakis Vitaly Gariev

En Xataka | Las redes sociales fueron un día un lugar donde contar nuestras vidas. Ahora la tendencia es otra: "cero posts"

Fuente original: Leer en Xataka
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