Sigue el cuerpo a cuerpo entre Santiago Abascal y María Guardiola en las primeras horas de la campaña electoral en Extremadura. Tras la polémica de esta mañana en la que la candidata del PP acusó al líder de Vox de lanzar mensajes "machistas" al insinuar su posible sustitución al frente de los populares extremeños tras las elecciones para alcanzar un acuerdo, esta tarde en Cáceres, Abascal ha vuelto a incidir en la primera polémica de estas elecciones, pero sobre todo ha querido aclarar lo ocurrido: "¿Y qué tiene esto que ver con el machismo? Si yo no estoy diciéndole nada por ser mujer. Yo solo estoy diciendo que la señora Guardiola es incapaz de llegar a acuerdos porque es una señora soberbia porque si fuera un señor diría que es un señor soberbio", ha afirmado. Y a partir de ahí, se ha lanzado al ataque: "¿A quién me recuerda esto?", se ha preguntado. "A quién me recuerda que en cuanto le dices algo responde: machismo". Y ha añadido: "Ésta es la Irene Montero de Extremadura" para subrayar que "ya está bien de querer amordazar a la gente con el insultito (por machista) de turno, cuando además ya probó con esos insultos, el 23 de julio de hace dos años en las elecciones generales, ella fue la que estuvo lanzando todos esos insultos a Vox y a los votantes de Vox y ayudó a la izquierda a movilizarse contra Vox con este tipo de patrañas".
Momentos antes, Abascal había explicado que él se limitó a contestar a las preguntas de un periodista sobre si después de las elecciones los dos partidos del centro-derecha no se ponen de acuerdo para conformar gobierno en Extremadura. Así, explicó que fue el periodista el que le insistió en que si Vox iba a exigir la sustitución de Guardiola por otro candidato a la presidencia de la Junta para poder pactar: "Yo insistí en que a nosotros no nos corresponde poner los candidatos de otros partidos, eso es cosa de ellos... pero si la señora Guardiola si es la más votada y no tiene mayoría absoluta y tiene que negociar con otros, y no es capaz de alcanzar un acuerdo, pues igual tienen que plantearse (en referencia al PP) a otra persona, otro candidato u otra candidata", ha especificado. A raíz de ello, Abascal considera inexplicable que, ante declaraciones así, la reacción de la presidenta de la Junta de Extremadura sea tacharle de "machista".
El líder nacional del PP, Alberto Núñez Feijóo, también de visita en Extremadura en este inicio de la campaña, que había defendido por la mañana a María Guardiola ("nuestros candidatos no son marionetas") tras la polémica generada. Y desde la Plaza de San Jorge en Cáceres -la ciudad natal de María Guardiola (que hoy ha celebrado su cumpleaños)-, Abascal también se ha referido a él porque Feijóo señaló que nadie conocía el nombre del candidato de Vox, Óscar Fernández, y que éste había sido designado por Vox en Madrid: "Claro que lo hemos elegido en la ejecutiva nacional de este partido, porque somos un partido nacional, como también lo hace el PP, como dice en sus estatutos, que me he leído esta tarde". Y añadió: "Que no se preocupe el señor Feijóo, que va a saber muy bien quién es Óscar Fernández en cuanto se abran las urnas, en cuanto vean los votos que ha recibido Óscar, lo va a saber muy bien. Le va a conocer porque van a tener que negociar con él".
En este sentido, le ha recordado a María Guardiola que se ha negado a participar en el debate electoral organizado por RTVE, al que sí acudirá el candidato de Vox: ""Eso que ha dicho hoy mismo la señora Guardiola de que no tiene miedo a nada... sí lo tiene, a Óscar Fernández le tiene miedo porque no quiere debatir con él, aunque aún está a tiempo de rectificar y de tener un mínimo de valentía", le ha instado.
Por lo demás, Abascal ha explicado que en esta cita electoral su formación va a defender el "sentido común" frente a las etiquetas ideológicas. "Yo no me encuentro a nadie por la calle que me diga que soy muy de derechas o que soy muy de izquierdas o yo de centro", ha señalado, asegurando que lo que ve son autónomos que no llegan a fin de mes, gente del campo que dice que "el campo está muriendo" y españoles "hartos de la corrupción". "Yo creo que eso es de esto, de sentido común. Y eso es lo que nosotros vamos a defender en esta campaña en contra de todos los demás", ha insistido el líder de Vox.
Para Abascal, "no es de sentido común el abandono que ha padecido Extremadura desde hace 40 años a manos del bipartidismo corrupto", que ha entregado infraestructuras al separatismo vasco y catalán mientras el campo extremeño sufre burocracia, competencia desleal y criminalización desde Bruselas y ha advertido, a su vez, sobre las consecuencias de la inmigración ilegal y de la degradación de los servicios públicos. "Todos lo aceptan como ovejas. Todos los políticos, mucho menos los de Vox, que por eso nos fuimos del Gobierno de Extremadura, del de Valencia, del de Murcia, del de Baleares, del de Aragón y de todas partes porque no queríamos traicionaros a vosotros", ha afirmado.
Durante su discurso, el líder de Vox ha defendido el arraigo y la prioridad de los españoles. "Nosotros queremos que los de aquí sean los primeros en su propia tierra y que los de aquí puedan nacer aquí, trabajar aquí, tener una casa aquí, formar una familia aquí y vivir aquí toda su vida acompañando a sus padres y a sus abuelos".
Por último, ha vuelto a denunciar la "corrupción socialista" y la ha descrito como "una mafia" cuyos protagonistas "iban los cuatro en un coche (...) llenando el depósito con dinero de la prostitución del suegro", y ha reprochado a Pedro Sánchez que ahora diga que "no les conoce en lo personal". "Qué forma de reírse de la gente", ha concluido.