Las amenazas políticas no se han hecho esperar. El BNG ha advertido de que romperá el pacto de gobierno en la Diputación de Lugo si su presidente, José Tomé, denunciado por presunto acoso sexual por al menos seis mujeres a través de los canales internos del PSOE, no dimite o no es apartado de la Presidencia.
El vicepresidente de la institución, Efrén Blanco, ha trasladado la posición del grupo nacionalista, exigiendo al PSOE una actuación inmediata, el apartamiento de Tomé de todas sus funciones y una investigación de las denuncias hasta el final. El BNG ha reiterado su política de "tolerancia cero" frente a la violencia machista y ha expresado su apoyo a las denunciantes, reclamando además respeto y confidencialidad para evitar nuevas filtraciones o cuestionamientos públicos.
La presión se produce después de que la portavoz nacional del BNG, Ana Pontón, afirmara que, si Tomé no dimite, el PSOE "debe apartarlo de sus cargos". "Lo que vamos conociendo nos produce asco, indignación y repulsión", aseguró, subrayando que las primeras palabras deben dirigirse a "las mujeres valientes que se atreven a denunciar". Pontón reclamó además explicaciones al secretario general del PSdeG, José Ramón Gómez Besteiro, y a la secretaria de Organización, Lara Méndez, para aclarar si conocían los hechos y "miraron para otro lado".
Tomé gobierna la Diputación de Lugo en coalición con el bloque, lo que eleva la amenaza de una ruptura institucional. Fuentes del BNG confirman a este periódico que la formación da por hecho que el dirigente socialista acabará dimitiendo, bien por iniciativa propia o tras la intervención de su partido. "No contemplamos otro escenario", apuntan, mientras esperan un posicionamiento del PSOE.
En este contexto, y después de negar por la mañana los hechos, José Tomé ha convocado una nueva comparecencia esta tarde, a las 17.00 horas, en la sede del PSOE de Monforte de Lemos, donde los grupos políticos esperan que anuncie finalmente su dimisión.
Horas antes, durante un acto oficial ante el Ayuntamiento de Monforte, Tomé ha rechazado las acusaciones y ha acusado a las denunciantes de formular "acusaciones sin pruebas". "Lo que salió publicado es totalmente falso y mentira", aseguró. El dirigente socialista insistió en que, pese a la gravedad de los hechos descritos, tiene derecho a defenderse "como cualquier ciudadano" y anunció que emprenderá acciones legales.
El PSOE tiene constancia del registro a través de su canal interno de una denuncia "genérica" por acoso sexual contra el presidente de la Diputación de Lugo, José Tomé, de hace "horas" y ha pedido tiempo para poder actuar con "unas mínimas garantías jurídicas". "Somos los primeros interesados en que se resuelva con la mayor rapidez posible", apuntan fuentes del partido, que de momento no le ha pedido al presunto agresor que renuncie al cargo.
Según la información adelantada por el programa Código 10 (Cuatro) el martes por la noche, seis denunciantes han alertado de tocamientos sin consentimiento y propuestas de empleo a cambio de favores sexuales por parte de Tomé. A estos hechos denunciados, repetidos de forma reiterada, se sumarían mensajes subidos de tono y llamadas telefónicas "obscenas".
Las acusaciones contra el presidente de la Diputación de Lugo se han conocido en plena polémica por la falta de diligencia del PSOE en la gestión de las denuncias por acoso sexual presentadas internamente por dos trabajadoras de La Moncloa contra el ex asesor del Gobierno Francisco Salazar y también por ignorar dos veces a una concejala de Torremolinos (Málaga) contra el secretario general de los socialistas en el municipio, Antonio Navarro, que ya ha sido suspendido de militancia.
Sobre la multiplicación de casos en los últimos días, en el equipo de Pedro Sánchez insisten en que su partido es el único que tiene un canal específico para poder alertar sobre este tipo de conductas incluso de forma anónima, que está "para ser utilizado" y que no hay temor a que puedan proliferar en los próximos días. "No puede ser que existan protocolos y luego consideremos que las denuncias son heridas", advierten.
El PSOE no ha adoptado aún ninguna medida disciplinaria contra Tomé con el argumento de que apenas transcurrieron unas horas desde que la denuncia llegó al partido hasta que fue difundida por televisión. En este sentido, apuntan que, aunque los testimonios de las mujeres puedan parecer "obvios" por las capturas de mensajes mostrados en pantalla, "no se ha podido hacer todavía una mínima diligencia".
En el Gobierno, por su parte, han incidido en que el machismo es "un problema estructural" y que, según los resultados de un estudio reciente del Ministerio de Igualdad, una de cada tres mujeres han sufrido acoso sexual. "Si el PP cree que no tiene a ninguna mujer en esta situación está negando la evidencia", recalcan.