CRÍTICA
Esther Ferrer: acción y pensamientoMADRID
La concesión del premio Tomás Francisco Prieto lleva aparejada una muestra en La Casa de la Moneda. El privilegio recae en la artista vasca y su universo lógico, serializado y matemático
'Blue, blanc, rouge. Nos ancêtres les goulois' (1968-1972) ABCMadrid
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Iniciar sesión 30/12/2025 a las 11:25h. CompartirEsta funcionalidad es sólo para registrados
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Número Importe ComprobarEl premio Tomás Francisco Prieto es una distinción creada en 1990 que promociona la medalla como formato artístico contemporáneo y que ha sido concedida a importantes figuras, entre otras, Tàpies, Chillida, Susana Solano o Liliana Porter. Comporta asimismo el diseño de una medalla ... que, una vez acuñada, pasará a formar parte de la colección del Museo de la Real Casa de la Moneda.
Esther Ferrer (San Sebastián, 1937). La Fábrica Nacional de Moneda y Timbre-Real Casa de la Moneda (FNMTRCM) acoge ahora 'Pliegue y proceso', una exposición dedicada a su figura. Noticias relacionadasLa muestra ha sido concebida, no desde un punto de vista meramente cronológico, sino más bien como una amplia y abierta panorámica de su universo creativo, tendiendo nexos y pliegues entre sus diferentes obras, formatos, medios expresivos y momentos de creación. Esther Ferrer es sin duda una de las artistas más importantes e influyentes del arte contemporáneo español y también europeo.
Poseedora de una brillante trayectoria, construida sobre la base de un acertado empleo de la experimentación, el arte performativo y un profundo desprecio de todo lo que pudiera ser mero convencionalismo, se ha erigido por sus méritos en una voz propia, personal e inteligente.
Corriente de aire fresco
Los primeros hitos destacados de su carrera corresponden a su pertenencia al grupo ZAJ, al que aportó una visión feminista y personal, y que junto a Juan Hidalgo, Ramón Barce y Walter Marchetti en los 60 dieron vida a un importante colectivo de vanguardia, relacionado con el movimiento Fluxus que, entre otras cosas, supuso una saludable corriente de aire fresco, irónico y experimental, dentro del mayoritariamente anquilosado panorama del arte nacional de ese momento.
Las señas de identidad creativa más referenciales y personales de Ferrer han sido y son su continua dedicación al arte de acción, y dentro de este, el especial concurso de las 'performances', el empleo del cuerpo como un vehículo expresivo que superaba los meros límites de la representación para convertirse en protagonista esencial, la activa presencia e interacción del público, y una serie de constantes como la investigación y reflexión sobre el paso del tiempo, los procesos lógicos o matemáticos, la idea de azar, la repetición y –muy vinculada a ésta– la serialidad.
Guardar las formas. En las imágenes, de arriba abajo, 'Pi' (2009-2010). Detalle de la instalación homónima; maqueta de 'Recorrer un cuadro de todas las formas posibles' (1984); y maqueta de 'Instalación con sillas' (1973) Esther FerrerPara llevar a buen fin sus proyectos ha empleado una amplia y diversa batería de recursos como las instalaciones, la foto, la pintura, la escultura, el arte sonoro, las 'performances', el 'collage' y los objetos. A lo largo de su carrera ha recibido numerosos premios como el Nacional de Artes Plásticas (2008) o el Velázquez (2024), y asimismo representó a España en la Bienal de Venecia de 1999.
Esta propuesta expositiva supone una buena oportunidad de contemplar algunos de sus principales proyectos a lo largo del tiempo, en un interesante diálogo entre piezas históricas, como 'Poema de los números primos', 'Pi', 'Autorretrato en el tiempo' y 'Proyectos espaciales', junto a creaciones más recientes, mostrando siempre una notable coherencia y una marcada evolución de su ideología y de su sintaxis que continúan bien vigentes en la actualidad.
Una importante característica a señalar es el destacado papel que juega el propio proceso creativo, con la presencia de propuestas que no llegaron a ver la luz o que quedaron inacabadas, lo que viene a subrayar el valor de los procedimientos más allá del objeto artístico ya terminado.
Esther Ferrer: 'Pliegue y proceso'
Museo Real Casa de la Moneda. Madrid. C/ Doctor Esquerdo, 36. Comisaria: Beatriz Martínez. Hasta el 12 de abril. Cuatro estrellas.
Así, en la exposición pueden verse piezas espaciales, 'performances' documentadas, vídeos, instalaciones, maquetas, bocetos, partituras, trabajos inéditos y diverso material documental, que ponen en cuestión las fronteras entre el arte y la vida, lo público y lo privado, lo efímero y lo permanente, y dibujan un amplio fresco de obras en las que el azar, las estrategias corporales, los procesos de acción, la experimentación, el espacio y el tiempo, van marcando el itinerario.
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