No es una novedad la posición en contra de Emiliano García-Page a las cesiones de Pedro Sánchez a Junts a cambio de sus votos en el Congreso, pero este miércoles la ha expuesto de una forma muy gráfica. "[Carles] Puigdemont y los suyos no han respetado al Gobierno cuando les hablamos de pie. Pensar que de rodillas nos van a respetar más es un poco absurdo", ha afirmado el presidente de Castilla-La Mancha.
Así, el barón del PSOE más crítico con la política de alianzas del partido a nivel nacional muestra su disconformidad con la estrategia de acelerar la tramitación de algunas de las exigencias de la formación independentista para tratar de rearmar la mayoría parlamentaria de la investidura y, de paso, cortocircuitar el intento de acercamiento del PP a ella a través de la patronal catalana para que se sume a una eventual moción de censura.
"Nosotros vamos a hacer todo lo posible para no se ponga en el mercado el concepto de igualdad bajo ningún concepto. De ninguna manera la igualdad y menos por un socialista se puede poner en el mercado de la transacción política", ha recalcado Page antes de intervenir en un acto por el 47º aniversario de la aprobación de la Constitución Española.
Según el dirigente castellanomanchego, "ya se han hecho demasiadas cesiones" y considera que "todo el mundo está harto de los privilegios que se buscan desde el independentismo". A lo que apostilla: "No ha traído nada más que dolor a Cataluña y dolor al conjunto de España".
"Si lo que el PSOE se quiere plantear de cara a unas futuras elecciones es ofrecer lo mismo podemos llevarnos un disgusto muy considerable. Si vamos presumiendo de habernos arrodillado ante Puigdemont y además se quiere ofrecer seguir así ante la situación política me parece que nos estamos equivocando", ha agregado Page.
Además, se ha referido a dos de las personas que apoyaron a Sánchez en su reconquista del liderazgo de Ferraz, el ex ministro José Luis Ábalos, en prisión por su presunta en la red de cobro de comisiones ilegales en cuya investigación ha trascendido también la contratación de prostitutas, y Paco Salazar, acusado de actitudes machistas por parte de dos trabajadoras de La Moncloa.
"Este grupo de primarios nos está haciendo un boquete muy considerable a todos los socialistas y al mundo del progreso en España. Primarios en su comportamiento y no sólo en eso. Es verdaderamente dañino para todos. Además nos hace sentir vergüenza porque lo más importante de la política es hacer lo que se predica, cumplir con lo que se promete", ha expresado el presidente de Castilla La Mancha.
Además, Page ha lamentado las consecuencias que el comportamiento de sus ya ex compañeros de filas puede tener sobre "millones de mujeres que han confiado siempre en el PSOE como la gran fuerza que ha cambiado y que ha apoyado el feminismo": "Me duele que puedan pensar que la mayoría somos así".